sábado, agosto 27, 2005

Pichu opina

Bueno, bueno muchachos, tranquilos, llegó la hora de que me meta, vamos a organizar un poco los conceptos.

1.Pablo, mi querido Pablo, a veces me haces reir, otras llorar, pero en definitiva ambas congojas son expresión del más puro asombro. Porque llego a pensar en ciertas ocasiones que sos la más noble y fiel reencarnación de Pierre Proudhon(ver Qu’ est-ce que la propiete), aquel que condenaba todo orden propietario, por antisocial y contrario al derecho natural, y cuya tesis se basó en suprimir el orden estadual y todo órgano coercitivo. (CBC, te acordás?). Así llegó a Polemizar con Marx. Pero no vivimos en un orden natural, mi amigo, vivimos en una sociedad con conflictos desde que existen sendos individuos.
Resulta, Pablo, que desde que esto nace, se hizo con reglas y puso en juego a dos partes con intereses contrapuestos. Ahí surge el problema. Ahí se desvanece el “café como momento de reflexión pero también como posibilidad de encuentro”. Ahí, ese momento pasa a ser nada más que una utopía. Está bien, vivir en un mundo ideal, de quimeras, vale la pena, pero, no se si lo vale quemarse las pestañas tratando de cambiar el mundo real. En todo caso hay que remontarse muy lejos, hasta antes de Cristo, cuando el mundo helénico se debatía tras un cuerpo redondo (no se llamaba balón) de no se que material.
Seamos honestos, eso es este deporte, un cúmulo de reglas que ponen en juego el “a ver si te puedo superar”. Esa es la esencia, aunque la desconozcas. Después, si querés discutimos, como debería ser? pero eso da para otro capítulo

Me deleito con la ensalada de nombres que se han deslizado en estas glosas, y entiendo que muchos de ellos estarían encantados si este debate tomara estado público, por haber vuelto del exilio de la memoria. No quiero hacer nombres en particular, para no herir susceptibilidades, pero cada uno recogerá el guante.Y no hablo solo de quienes andan a orillas del Nilo, sino también de quienes clausuran los sueños de sus fieles, acá nomás cruzando el puente.
Menotti, Bilardo, Bielsa, Falcioni, Alfaro, Gorosito, a quien más mencionaron?, recuerdan esa canción? “Los técnicos se van, los jugadores pasarán...”que cierto dios mío. El fútbol está ahí, es uno sólo. Viene un tipo y quiere darle ciertos ribetes, adornos, estilos, formas, que el que lo sucede se encargará de desmantelar, y así sucesivamente (a veces dos siguen un mismo estilo). Pero el sentir es siempre el mismo, el poder de ser más que el adversario. No estoy diciendo lisa y llanamente, que el fin justifica los medios en todo los casos, pero si que esa es la esencia que dio nacimiento a este deporte. Superar al otro. Esas bases prenatales excluyen, me parece, o al menos dejan en un segundo plano, toda idea romanticista de tratar al esférico. Algo así como la estructura y la superestructura que pregonó Marx. Como ya me imagino sus expresiones, les aclaro, que esto es lo que muestra la historia. No lo digo yo. Está ahí. Ahora, digo yo, la política no es así? Ergo, la vida no es así????
Si esto no es así muchachos, hagan un test: porque no salimos contentos abrazados al rival, cuando en el más mísero partido de barrio nos pintan la cara con toque, bicicleta y rabona?...porque no hay atisbos de alegría en nuestros rostros por el fútbol del rival?. Es así amigos, está en nuestra sangre y eso expresa el fútbol como juego.

Al margen de mi “filosofía barata y zapatos de goma”, detengámonos a pensar que estamos discutiendo. Que importa la forma de jugar a la pelota? Quien lo duda? Obvio que si. Que importa el resultado? obvio que también. Entonces, lo que nos importa es detenernos en un orden de prioridades, ahí es donde surgen por un lado, los tipos como César Luis Rabanito, Cappa , Valdano, y otras yerbas; y por otro los Carlos Salvador Bidón y sus bidoncitos (pongan los nombres que quieran).
Las dos cosas no representan un dicotomía, más bien van de la mano, muy bien Ernesto, y el mejor y más fresco ejemplo es el penoso River del Jefe: un equipo que juega mal, que por ahora mantiene resultados pero no va a llegar muy lejos ni quedar en el recuerdo, de esa manera. El eje de la cuestión es siempre que entendemos prioritario, pero una valoración no debe excluir a la otra, te llames, Menotti, Bilardo, Cappa, Basile, Bielsa, Provitilo o Schneider


Jorge Schneider*

*Sociólogo. Ensayista. Participó de los Talleres de Lectura organizados en el Colegio Mariano Moreno por la Prof Beatriz Luque. Autor, junto a Pablo y Ernesto Provitilo, de un amplio repertorio de canciones que inundaron los pasillos del Moreno.

No hay comentarios.: