lunes, noviembre 30, 2009

Candombes del olvido


Difícil arrojar un pronóstico sobre el desenlance del presente Apertura. A tres fechas del final, se mantiene la incógnita del ganador, debido a la exigua distancia de puntos entre los equipos ubicados en la cima y un calendario exigente para los candidatos al título. No menos complejo es ponderar quién juega mejor en este fútbol donde ya no dirigen Cabrero, Cappa, Bianchi o Ramón Díaz.


Podría decirse, con alguna razón, que Banfield hizo méritos para coronarse por primera vez en la historia: es regular, tiene dos delanteros temibles, y orden en todas sus líneas. Pocas veces confunde o se apartan del plan original, si bien asumir la condición de cuadro protagonista parece turbarlo en algunos momentos, como ocurrió ante Racing el último domingo, quien le ganó por prepotencia futbolera y por historia. Fue notable lo del cuadro de Vivas. Claro que el rendimiento de Banfield también moviliza lecturas opuestas según el lente ideológico de cada escuela: pragmático-conservador para el filomenotismo, sólido-eficaz para el panbilardismo.

Ñuls, por su parte, cifra sus posibilidades en el oportunismo de su lungo goleador, Joaquín Boghossian, y en la movilidad y las libertades de dos jugadores vitales en el esquema implementado por Sensini: Formica y Achucarro. Al igual que Banfield, suele ser implacable en momentos clave del partido y ofrece garantías en su última línea pese a los nefastos primeros 15 minutos, ante Central. También Ñuls, presumiblemente, divide aguas en su territorio y un poco más allá a raíz de su estilo aguerrido y no pocas lagunas -ya que hablamos de agua- en varios pasajes del partido. Aunque los progresos exhibidos son genuinos y obedecen a una causa superior: el saneamiento institucional tras 14 años de gestión de Eduardo López.


Banfield y Ñuls, entonces, presentan coincidencias en su propuesta y son justos líderes de un torneo desparejo, signado por la inestabilidad y los pésimos arbitrajes. Acaso Vélez, más descansado tras su participación internacional, pueda terciar hasta el final si se combinan algunos resultados. Pero hoy la disputa parecería centrarse en los dos primeros, los que ganaron en escenarios adversos y forjaron una campaña destacada lejos del ruido de los grandes, los que tienen dos goleadores excelentes, uruguayos de ley, y las vallas menos vencidas, los que sueñan con un título con implicancias gravitantes: el primero para los del sur que igualaría a un tal Lanús, el sexto para los de Rosario que aventajaría por dos a Central.


Eso sí: hay un abismo entre el torneo que ganó Vélez y éste que cierra la temporada. La revista del campeón, esta vez vez, va dedicada a uno solo.

sábado, noviembre 28, 2009

El arte de informar


La proyección en cines del clásico español revela una marca de época: la definitiva consagración de la industria del entretenimiento en el deporte. Los aficionados de ese país podrán disfrutar del partido con abonar una entrada -de valor idéntico al de los estrenos cinemátográficos- en algunas de las 51 salas habilitadas, repartidas en 22 ciudades del país ibérico. Se trata, en rigor, de un hecho conocido -el dominio de las industrias culturales y sus múltiples estrategias para captar públicos-, que podría aplicarse a otros fenómenos, por ejemplo el del avance y la consolidación de los diarios deportivos en el mundo. Hace poco, empresarios de diversos países confluyeron en una mesa redonda desarrollada en el marco de un encuentro organizado por la SIP en Buenos Aires (Sociedad Interamericana de Prensa). Entre otras frases ingeniosas, los asistentes pudieron escuchar: "Los diarios deportivos tienen éxito porque les da a los fanáticos del deporte lo que quieren leer: 'la culpa es de los árbitros". Risas en un auditorios donde los auténticos trabajadores de prensa miraban a través de la pantalla.

También se habló del fútbol como motor del negocio, de los intereses y expectativas de las audiencias, y de un modo de hacer periodismo que combina aspectos informativos con pasión. En España, país que espera el clásico entre promociones variopintas y declaraciones cruzadas de los protagonistas, la prensa deportiva ocupa un rol trascendente. Existen al menos cuatro diarios enrolados en la causa de entretener, polemizar e investigar nada. Dos de Madrid (Marca y As) y dos Cataluña (Sport y Mundo Deportivo) concentran la atención del medio futbolero en ese país y despliegan recursos estéticos similares tanto en sus ediciones impresas como digitales: portadas de varios colores, títulos impactantes, caricaturas, juegos de diverso tipo. En materia de contenidos tampoco presentan diferencias, ya que los 4 periódicos mencionados editorializan con parcialidades y en un tono cargado de desmesura, fijan los nudos temáticos en la actualidad de las instituciones con más hinchas en sus respectivas localidades, e incluyen secciones audiovisuales en sus portales porque, como explicaron en el cónclave de la SIP, "hay que retener a un público que hoy busca información de modo incesante".

Así, el Barsa-Real Madrid reafirma su carácter de partido situado entre las nuevas tecnologías de la información. Un encuentro que se juega en el estadio, en las redacciones y ahora en el cine.

Los diarios deportivos, en ese marco, se instalaron con gran eficacia. Divierten, imponen agendas, en algunos casos están muy bien hechos. La incógnita es saber si hacen o no periodismo. Es un debate abierto. Para muchos ofrecen una alternativa inteligente, en sintonía con las transformaciones sociales y culturales. Para otros, como admitió Carlos Ulanovsky en Argentina, le siguen hablando a un lector "que no soy yo".



viernes, noviembre 27, 2009

Mirar al super 8


Astrada incurre en los mismos, patéticos, errores que algunos de sus antecesores: la ortegadependencia. Suena inconcebible que con Mauro Díaz en el plantel, juvenil de notables condiciones, el entrenador se incline por un jugador que no es la mejor opción para reemplazar a Gallardo debido a causas hartoconocidas. El fanatismo y la obsecuencia boba desmerece el recuerdo y la gratitud con el ídolo. Desacraliza su figura. De este modo, se perjudican todos; Ortega, porque constata una imposibilidad, el técnico, porque resigna poder y confianza en su trabajo, y River, porque levanta un muro que cierra el paso a los pocos juveniles del club.

Después vendrán las correspondientes autocríticas. Donde todos y nadie son culpables.

Ya que están, muchachos dirigentes, podrían recomendar a la próxima gestión seguir incorporando viejos talentos del super 8 para cuando Díaz se vaya. JJ Borrelli y Luigi Villalba ofrecen panorama, amor por la camiseta y rondas de mates en la pieza de Almeyda con el mismo termo de siempre.

martes, noviembre 24, 2009

Revoluciones de Quito


Liga Universitaria de Quito y Fluminense, por segunda vez en la historia, juegan la final de un torneo continental. En la Libertadores 08 la copa fue para los ecuatorianos, luego de una serie abierta y dominada por la emoción. Recordemos los scores de aquellas decisivas contiendas: 4 a 2 venció la Liga en Quito y 3 a 1 triunfó el Flu en Río (por penales ganaron los de camiseta blanca).
Ahora, en la previa, parecía ser el turno de los brasileros, del país que contabiliza un solo trofeo en el corto historial de la Sudamericana, del equipo siempre eclipsado por las luminarias, los títulos y la popularidad del rival estadual. Sin embargo la Liga, continuando con los entretenidos enfrentamientos entre estos dos clubes, goleó 5 a 1 en el partido de ida, en una actuación que reafirma sus chances de coronarse, a partir de la capacidad de algunos players, sentido colectivo y rendimientos sobresalientes en condición de local (19 goles a favor en 4 partidos, con holgados triunfos ante Lanús, River de Uruguay y el citado Flu).
Sorprende, en sintonía con esto último, observar el crecimiento del fútbol ecuatoriano en general, y de la Liga en particular. Con epicentro en Quito, el deporte más popular en ese país experimentó un salto cualitativo notable desde hace algunos años y logró, mediante uno de sus representantes, introducir una fisura entre los grandes del continente, si bien es cierto que se trata de un fenómeno incipiente. No hay que ser muy agudo, además, para advertir que la Liga saca claras ventajas cuando se desempeña en la altura, factor difícil de soslayar al analizar su exitosa actualidad. Pero jugando en el llano -que supone complicaciones semejantes para los no adaptados- ha jugado partidos en gran nivel, con un estilo -como decíamos en otro post- batallador, infrecuente si revisamos viejos tapes donde vemos a formaciones ecuatorianas muy livianas, sin la consistencia ni la personalidad para imponerse en duelos ásperos y cargados de tensión como ocurre en la Libertadores.
Así, la Liga acaricia otro título continental, el tercero en dos años (también ganó la Recopa), afirmado -daría la sensación- en un cambio conceptual cuyos exponentes incluyen a una destacada generación de jugadores ecuatorianos, acompañados por los gravitantes aportes de argentinos y uruguayos dentro y fuera del rectángulo, y el necesario orden institucional que la época exige.
Mejor mirada la cuestión, argentinos y uruguayos al margen, el mérito es todo de la Liga y de Ecuador, un país que quedó a un paso de disputar su segundo mundial, y a nivel clubes en la región exhibe a su promisorio representante blanco. Una alternativa de nuevo cúneo en el concierto internacional, y un equipo decidido a nutrir con éxitos la historia futbolera del vecino país.

jueves, noviembre 19, 2009

Tinto a Tinto


San Martín de San Juan amaga con un liderazgo sostenido, luego de un comienzo que lo encuentra puntero cómodo en la B Nacional. Afirmado en los reflejos de su arquero (se llama Pocrnjic, se pronuncia ProncjkJknrbjkinuinjic), cierto orden en todas sus líneas y contundencia ofensiva a partir de 4 jugadores de extraordinario presente -Sebastián Penco, Walter Cuevas, Mariano Torresi y Leandro Becerra-, sacó una diferencia importante sobre el tercero (los dos primeros ascienden) y tiene razones para ilusionarse con una segunda participación en Primera División, de acuerdo con algunos datos que puntualizamos brevemente más abajo.
Dirigido por Enrique Hrabina, técnico sin grandes pergaminos, el verdinegro perdió apenas 3 partidos, ante Quilmes, Gimnasia de Jujuy y Olimpo, mientras que de local apenas resignó puntos con All Boys y Atlético de Rafaela. Es decir, jugadas 16 fechas, puede hablarse de un serio candidato al ascenso, si se considera -además- que Atlético Tucumán acumulaba 24 unidades en la temporada pasada, 12 menos que San Martín en idéntica cantidad de fechas. La tendencia parecería conspirar contra quienes hoy se ubican del quinto al undécimo lugar.

Es cierto que resta bastante y lejos parece haber quedado aquel título de Chaco For Ever en 1987-1988 (le ganó un histórico campeonato a Lanús, luego de ubicarse 8 puntos debajo a pocas fechas del cierre), pero en un torneo sin visitantes, que entrega dos ascensos directos, y en el cual hay claras diferencias (económicas, estructurales, deportivas) entre los clubes del interior y los del área metropolitana, los sanjuaninos tienen derecho a degustar con premura unos buenos Callias y, desde ya, ahorrar fondos para visitar la Bombonera, el Coloso del Parque o la populosa Paternal después del mundial de Sudáfrica.

miércoles, noviembre 18, 2009

Canarias, por favor


Se juega el último repechaje correspondiente al mundial de Sudáfrica y Uruguay, campeón del mundo, puede convertirse en el 32º clasificado. Un cierre de lujo para un certamen que -si pasan los celestes- reunirá a todos los ganadores de la competencia, países con rica historia futbolera, naciones enemistadas por motivos políticos, y escasísimas sorpresas. Para el equipo de Tábarez, de confirmarse el triunfo ante los Ticos, implica regresar a la máxima cita tras la frustante caída ante Australia, por penales y también en repechaje, una mañana de 2005. Del mismo modo, el Maestro retorna a un mundial, con más experencia y un interesante abanico de opciones para delinear la lista de 23. Otro factor a considerar es que los orientales, en Sudáfrica y si el sorteo lo permite, tienen la posibilidad de reivindicarse con la historia tras algunas frustraciones, y a partir de plantearse un objetivo modesto: superar los octavos de final de México '86 e Italia '90, sus mejores registros en los últimos 24 años.

Anotaciones, en definitiva. Lo cierto es que pasó demasiado tiempo para un pequeño grande que, enhorabuena, llevará su gloria, su garra y sus costumbres rioplatenses al Mundial por el cual bregó perseverante, a la uruguaya.

miércoles, noviembre 11, 2009

Muy Flú


Tras derrotar categóricamente a Cerro Porteño de Paraguay en condición de visitante, es casi un hecho que Fluminense jugará la final de la Copa Sudamericana. De no mediar una hazaña del otro Ciclón latinoamericano, por segunda vez consecutiva habrá un equipo brasileño en la instancia decisiva, lo cual constituye una buena señal para jerarquizar un torneo que exhibe carencias notorias.

Respecto del cruce ante los paraguayos, el Flú, sin brillar, ganó con justicia a partir de las meritorias actuaciones individuales de Darío Conca, Fred y Diogo, y carácter para afirmarse en un estadio díficil, escenario de partidos accidentados por la presión que ejerce el público en duelos entre clubes sudamericanos. De este modo, el conjunto de Río de Janeiro, rival histórico del Flá, buscará romper la inmisericordiosa racha sin títulos internacionales y confirmar el poderio futbolero de un país que -si supera a Cerro Porteño- presentó representantes en las últimas cuatro finales de los dos certamenes del continente (Fluminense e Inter en 2008, y Cruzeiro y Flú en 2009).

Dos apuntes finales. Por un lado, queda confirmado que la Sudamericana es un torneo elaborado a medida de clubes en crisis. El cuadro de Río, por ejemplo, mientras pelea por no descender en el ámbito local está a punto de clasificar a la final de la Copa. Asimismo, dos volantes ofensivos surgidos en River podrían levantar el trofeo: D'Alessandro (Inter) y Conca (Flú). No sería extraño que, además de buscar a Riquelme, dirigentes del Corinthians y también de otras entidades brasileñas piensen en Mauro Díaz o, en su defecto, Diego Buonanotte.

lunes, noviembre 09, 2009

Museos


Continuando con su política de aciertos, la dirigencia de River estrenará en las próximas semanas un coqueto e impresionante museo en el que se exhibirán piezas y obras alusivas a momentos victoriosos de la entidad millonaria, acompañados por glorias de todas las épocas. Nunca más oportuna una inaguración que, curiosamente, no solo cierra el segundo gobierno de José María Aguilar en el rubro marketing, sino que clausura una etapa en River: la de los subcampeonatos sesentistas y los títulos ininterrumpidos de las últimas tres décadas, la del semillero en ciernes donde siempre había un pibe mejor, la de la opulencia desvergonzada desde las miradas exteriores, el campeón más poderoso de la historia que Copani inmortalizó en una marchita.

Es la herencia, museificada, que deja el Aguilarismo y es también una señal contundente que conduce a una política a reconstruir donde ya no habrá millonarios para invocar. Será tarea de los D'Onofrios, Casellis, Passarellas, Meras Figueroas o Kippers refundar un club lejos del aire contaminante de la gestión que se va. Algo verdaderamente difícil dado que Aguilar e Israel, además de inaugurar un museo, inauguraron una forma de conducir y -fundamentalmente- una mentalidad que hizo de River una entelequia, un club que devoró su condición de institución ejemplar en 10 años y espantó a los hinchas con sus lenguajes desafectivizados e impopulares.

En ese marco, en este contexto de ruinas, River abre su museo. Acaso se trate de una metáfora que, agotadas las crónicas, los análisis y las editoriales que llenaron espacios en medios diversos, conviene tomarse con humor. Por ejemplo, imaginamos que la muestra no es completa y omite nombres, fechas y coyunturas. Suponemos, en consecuencia, que no debe ser redituable para nadie exhibir ante hinchas y turistas algunas instantáneas que nutren la última década, como el sobrio andar de Cabral, la deliciosa zurda de Abelairas o los piques al vacío de Gustavo Bou.

viernes, noviembre 06, 2009

Copa para todos


Sin equipos argentinos y con instituciones emergentes del fútbol sudamericano entre los cuatro mejores, quedaron definidos los cruces correspondientes a la 8º edición de la Copa Sudamericana, la mitad de la gloria, para el periodismo marca Pons, un pedacito de dicha, para hinchas y comunicadores sensatos. Las semifinales incluyen los duelos entre Cerro Porteño (sin títulos internacionales) y Fluminense (finalista de la Libertadores hace 1 año); y Liga de Quito (campeón de la máxima competencia continental en 2008) y River de Montevideo (segundo representante del Uruguay que llega a instancias de este tipo en el certamen).

Como planteábamos en otro artículo, se destacan la ausencia de entidades denominadas coperas en los tramos definitorios y, ligado a lo anterior, los progresivos avances de instituciones con menos raigambre internacional. River de Uruguay, por caso, es uno de los inéditos animadores del certamen pese a las carencias manifiestas en infraestructura, presupuesto, historia en las copas. Ninguno de estos aspectos, a priori atendibles para señalarlo como candidato, influyeron para que el cuadro uruguayo logre victorias decisivas, que lo ubican muy cerca de obtener su primer título importante, ya que en Uruguay solo fue campeón en torneos de segunda división y jugando en aquellas oportunidades -probablemente- en su estadio Parque Federico Saroldi.

El meritorio desempeño de River, sin embargo, no es extraño ni sorpresivo si se revisa la nómina de algunos ganadores de la Sudamericana, por ejemplo Arsenal (Argentina), Cienciano (Perú) y Pachuca (México). Un valioso antecedente que ilusiona no solo a los orientales sino también al resto de los semifinalistas de este año, cuatro protagonistas del continente que irán por su primera estrella en el certamen. Es que la Sudamericana ofrece un generoso mosaico de oportunidades para mejorar lo realizado en la temporada, para reescribir una historia y, sobre todo, para persistir con más experiencia a la hora de los grandes sucesos.

miércoles, noviembre 04, 2009

Repechajes


De los próximos dos grandes acontecimientos políticos-culturales que tendrán en lugar en el Uruguay, llama la atención que ambos sucesos, en los dominios del lenguaje , presenten rasgos parecidos no solo en el sonido: ballottage y repechaje. Parecería una marca distintiva de los orientales, un castigo de la época o la culpa de esa cadencia de la voz que torna lento y previsible cada uno de sus movimientos, el hecho de que los orientales definan sus días por venir en instancias trascendentes. Pero conviene evitar esencialismos y juicios anticipados.
Desde aquí, un blog perdido en el complejo mundo de las redes de la información, creemos que uno solo de esos acontecimientos merece debates que incluyan la participación plena de los ciudadanos y un intenso despliegue comunicacional-propagandístico con perspectivas diversas. Hablamos, claro, de la cerrada elección entre el Frente Amplio y el Partido Rosado, como llamó José Mujica -candidato del oficialismo- a la alianza entre Blancos y Colorados. El periodista uruguayo Jorge Da Silveira, al parecer, no cree lo mismo que nosotros aunque no es el único.
Sin ir más lejos, hoy en la audición de Fernando Niembro caracterizó el partido ante la selección de Costa Rica, que entrega una plaza al boleto de Sudáfrica, como una batalla donde "los orientales nos jugamos el pellejo", cargó contra el entrenador Oscar Tábarez por postergar a Santiago Silva, artillero del Banfield argentino, y habló sobre aspectos tácticos en relación al fútbol que, en su condición de cronista del diario El País de Montevideo, parecería ser un asunto a discutir con especial interés, desde Bella Unión hasta Montevideo.
Y, en cierto modo, es como señala el comunicador uruguayo, si bien avanza la campaña electoral con movilizaciones populares de ambos lados, festivales callejeros, polémicas y debates televisivos que exceden culturalmente a Lilita Carrió o Gerardo Morales. Ocurre que, Da Silveiras al margen, el fútbol tiene su importancia. Porque es un patrón cultural de los pueblos y porque está en disputa llevar la mística o una identidad construida en el tiempo a la máxima cita futbolera. Ni hablemos en Uruguay, el país de los campeones del mundo en dos oportunidades, tierra de grandes jugadores que dejaron su huella.
Con orígenes, desarrollos y derivaciones diametralmente opuestos, repechaje y ballottage coinciden en algo: son definitorios en contiendas que presentan revancha varios años después. Y más allá que forzemos comparaciones y muchos banalicen dos momentos que impactan de forma disímil, el fútbol y la política, alguna vez, podrían coincidir en su faceta menos contaminada y nociva.

domingo, noviembre 01, 2009

Facundos


Finalmente, después de 12 jornadas, apareció Quilmes en el competitivo torneo de la B Nacional. En base a garra y la jerarquía individual de algunos de sus jugadores, el Cervecero logró un triunfo con tintes de hazaña ante Unión -candidato a ganar el torneo como señalamos en otro artículo- que oxigena, de este modo, la situación de su entrenador, José María Bianco, blanco directo del enojo de los hinchas por el desconcertante desempeño del equipo.

Una victoria gravitante no solo por la condición del rival sino porque renueva las esperanzas del Cervecero en el momento justo, dado que faltan 26 fechas, tiempo suficiente para descontar unidades a los punteros e involucrarse en la pelea por uno de los dos ascensos directos. Como muestra del entusiasmo que suscitó el dos a uno ante el ex líder, alcanza con repasar los dichos de Bianco. "Les ganamos a los dos punteros, a San Martín de San Juan y Unión, lo que significa que estamos haciendo las cosas bien. Nosotros sabemos lo que queremos y dimos un gran paso para lograr nuestro objetivo que es salir campeones", señaló.

Cabe referirse, mencionadas las derivaciones de la victoria frente al cuadro Tatengue, a ciertos aspectos que realzan las chances de la centenaria entidad del Sur. Con gran habilidad para defender los intereses del club en los escritorios, los dirigentes armaron una formación equilibrada y poderosa que, en muchos partidos, puede decidir el rumbo de un partido definitorio, como ocurrió ante el cuadro santafesino. La lista de jugadores destacables en este Quilmes que busca resurgir incluye referentes defensivos vitales como los experimentados Walter Ribonetto y Juan Manuel Herbella, la seguridad del arquero Emanuel Trípodi -sustituto de Pontiroli-el compromiso de los jóvenes Francisco Cerro y Martín Quiles, dos delanteros frescos y potentes como Ramón Lentini y Mauricio Carrasco, y la cuota de gol, oficio y exotismo que aporta Facundo Sava. Es decir, este Quilmes reúne opciones diversas y liderazgos nítidos para afirmarse en la cima.

No menos importante es advertir que Quilmes figura como el equipo del área metropolitana mejor posicionado producto de tener claro sus objetivos. Se preparó para ascender y sabe cuales son sus ambiciones. Y si bien eso conlleva riesgos a raíz de la presión que ejerce el propio público, también es una presión para los rivales el hecho de que Quilmes, animador permanente desde que la vieja B se hizo Nacional B y luego B Nacional, se exhiba sólido, confiado y dispuesto -enhorabuena- a abandonar la categoría.