jueves, abril 16, 2009

El sueño de Tigre


Prueba de su crecimiento deportivo e institucional, amén del sostenido apoyo del municipio, Tigre palpita en las últimas diez fechas la consumación de un suceso histórico: jugar por primera vez un torneo internacional. Sorprenden, ciertamente, los logros acumulados por el club de Victoria en el último lapso. Saltó dos categorías en dos años, le ganó a todos los grandes con autoridad (algunos fueron goleados, entre ellos Racing en este Clausura y River en el Apertura 07), y quedó en la puerta de obtener un título local en dos oportunidades. Demasiadas conquistas para una entidad postergada en las dos últimas dos décadas y sumida en graves problemas económicos tras su descenso en 2002 junto a Platense y Central Córdoba, entre otros.
La actualidad del Matador, desde una mirada abarcativa y menos puntillosa, contiene fundados motivos para ilusionarse. Este año su campaña no es buena, es cierto, aunque suenan exageradas las reflexiones del propio plantel, luego matizadas por su director técnico. ¿Qué dijeron los players? "No entrar a una copa es un fracaso". Parece desmedido.
El entrenador, respetado por el club y respetuoso él de los convenios firmados, optó por algo más sencillo ante la corriente exitista de estos tiempos crispados. "Fracaso es no jugar bien". Porque Cagna sabe que de ese modo, fiel a un estilo que mantuvo al equipo en la cima, Tigre participará de las competencias internacionales en ésta o las próximas temporadas.
Con un fuerte arraigo popular en la zona norte del gran Buenos Aires, con los apoyos ya consignados y con las cualidades exhibidas por un grupo de hombres que conocen de esfuerzos y adversidades, el Matador viene cumpliendo metas en tiempo récord producto de la paciencia y la continuidad de proyectos. De momento, algunos hinchas valoran lo realizado y detectan las premisas que permiten amontonar éxitos y copiosos elogios. Una bandera ubicada en las nutrida tribuna local así lo sugiere: "Chino Luna, sacrificio y humildad".

1 comentario:

Kluivert dijo...

Muy buen texto, muchachos, como siempre. Y, efectivamente, Tigre es un caso que merece un reconocimiento de altura como éste, no como el que le dan los mamarrachos que hablan y escriben en los grandes medios. Estuve muy bien Cagna con esa respuesta, aunque no me lo banco al feo ese.