Gustavo Bassi, continuando con la teoría de presuntos favoritivismos arbitrales, jugó al cricket en Lanús. Mas aún; algunos lo vieron alentando en la final por el ascenso que el grana de Villagrán le ganó por penales al Quilmes de Kalujoverich, allá por 1990. No faltan, además, quienes denuncian la decoración del dormitorio de Bassi y esposa: fotos de Los Albaniles, una gorrita de Schurrer, una reproducción de la Copa Conmebol obtenida en 1996 y un pedazo de madera como recuerdo de la dinamitada tribuna que da a la calle Guidi.
Las acusaciones son rídiculas, claro. Como también es rídicula la parafernalia de conspiraciones, intrigas y acusaciones desplegada por dirigentes y medios de comunicación que no soportan los éxitos de Lanús. Ninguno diario, ningún canal deportivo, ninguna emisora democrática destacó con título catástrofe los arbritajes favorables al Boca de Macri o al River de Aguilar. Hagamos el ejercicio ya que estamos: ¿hubiese sido tapa de Olé el colorado referí, como ocurrió el domingo, si los beneficiados eran Boca o River?
No obstante, existen razones que trascieden al riverboquismo, en general, y a los fantasmas de los chicos, en particular. No exageramos, en tal sentido, si decimos que Lanús le molesta a un sector del medio futbolero en Argentina. Especialmente cuando aquello residual -excepcional, pintoresco, ejemplo transitorio para el resto- amenaza con volverse dominante a raíz de un modelo deportivo-institucional en el cual no revistan mecenas, grupos empresarios, representantes voraces, canales de televisión propios y dirigentes que sueñan -algún día- con suceder a Manolo Quindimil.
Resumiendo, a riesgo de volvernos reiterativos: si Lanús es beneficiado, como sostiene el elenco verdaderamente hegemónico, algo de la verdad se nos está escamoteando. Una vez más.
3 comentarios:
Sí, seguro que a los malos no les debe gustar que el campeonato de Lanús no haya sido una casualidad y que pueda repetirse. Pero, bueno, por algo se dice que el fútbol es lindo.
De acuerdo, Lanús nunca fue un equipo históricamente beneficiado y lo que veo es que hay como cierto interés en que Huracán dé la vuelta. No me parece mal, pero Lanús también juega bien.
Si hay interes en que Huracan de la vuelta, no lo tiene la cara televisiva del grupo Clarin precisamente.
Hace un par de semanas, lectura de labios mediante, le cayeron a Cappa.
El domingo montaron un show pocas veces visto para exonerar a un arbitro impresentable despues de un fallo tan extraño como tantos otros a lo largo de su carrera.
No veo una campaña "Pro Globo" ni una "Anti Lanus". Si me parece que Trisa va a pasarle factura a Cappa cada vez que pueda por haber sido el unico "actor" del futbol que apoyo abiertamente la nueva ley de radiodifusion.
Aclaro que soy cuervo y que admiro/envidio profundamente el modelo de club que es Lanus.
Que lo gane el que pueda...
Publicar un comentario