River-GELP

Opinión de Pablo

Mi opinión sobre el tema que planteó Ernesto es la siguiente:
quiero que River gane, ingrese a futuras copas y a Mostaza le vaya bien. No sé si notaron el otro dìa: un equipo que no mereció perder, en una cancha impresentable y con dos ausencias importantes: Alvarez y Radamel. Si entraba alguna de las del Rolfi, ganábamos 2 a 0 y estaríamos hablando de otra cosa..
No me importa Boca, que salgan campeones, a su forma, a su modo, vil, miserable, tan sucio como la impunidad que acompaña a Rolando Schiavi. Pero ese no es nuestro problema: River nació para otra cosa, ganar y jugar bien, cueste lo que cueste y caiga quien caiga. Pregunta: ¿si olvidamos nuestros principios, de qué sirve el fútbol? ¿Para qué mirarlo? ¿A quién le importa? Una vuelta olímpica de Boca nos pondrá tristes 15 días. No más. Y, para ellos, a un costo muy alto.
Párrafo aparte para el enorme Gimnasia de Pedro: imposible que me caiga mal el lobo, tiene una hinchada seguidora, familiar, que alienta, es ingeniosa y merece -como ningún otro equipo del fútbol argentino- la gloria. Aunque sea una vez en la historia.

Jorge dice

Se que estoy en deuda con el comentario, mañana lo mando sin falta, pero hoy quería opinar sobre este delicado tema que sacó Ernestai. Voy a ser directo, espero una derrota el domingo, no llegamos ni en pedo, y allanarle el camino al lobo significarían dos cuestiones positivas: evitar un Coco_Boca_Diego campeón y en su lugar que la corona se la lleve un virgo.
Pero (siempre hay un pero) sabemos como es River, siempre nos caga, entonces, en este caso que nos debe hacer un favor(si, ya que nos amargaron el año, nos hacen un favor al darle puntos al equipo que sea que le discuta a boca), es muy problable que haga todo al revés, y gane. O sea, muchachos, que el domingo al pronosticar nos encontraremos en la encricijada: pongo lo que quiero que pase (visitante) o lo que es muy probable que ocurra (local). Fin
Comentatio irónico del año: "...operan a Lore de la vista, se supone que va a ver perfecto por lo tanto si me quedo soltero en estos días es porque me va a conocer la cara por primera vez..."Ernesto, Hotmail, 21/11/05. Insuperable, todavía me duele la panza de reirme. Merece ir al blog junto con la frase de DD

Y Ernesto cree

gracias por las salutaciones a Lore, serán dadas. El primer ojo salió ok, el próximo lunes el otro. Hasta ahora no me fletó. Veremos cuando tenga los dos. Respecto al tema River-Lobo el filosófo Jorge Rial dice
"Dejémonos de joder: el domingo River tiene que ir para atrás. No hay otra posibilidad. Terminemos con el verso de que la historia exige esto y lo otro. Se pueden decir muchas pavadas, pero la realidad es una: ningún hincha de River quiere que Boca salga campeón. Mucho menos si somos nosotros los que le servimos el título. Hay dos cosas que a mí me dan placer cuando se trata de fútbol: que River gane títulos y que Boca pierda todo lo que juega. Y como nunca me llegué a ilusionar con este equipo de Mostaza (ya demasiado hizo), apuesto por Gimnasia. Ojo, porque es el que está arriba. Por mí que salga campeón Tiro Federal, pero Boca nunca"
Cuanto pragmatismo, que poco apego a lo romántico, cuanta crueldad. Y qué cierto. Lamentablemente suscribo estos conceptos de este sorete sin igual. Yo soy de River por dos cosas: porque quiero a River y porque detesto a Boca. Además soy una persona porque amo y porque odio. Me arrogo el derecho de poder amar y también el de poder odiar. Y llevado al fútbol es todo muy inocente. Porque en definitiva es fútbol, un juego, y yo solo quiero que Boca no gane. Que no gane nunca así como quiero que River gane siempre. Mi identidad riverplatense implica que quiera una cosa y no quiera la otra. Es una cuestión de opuestos. Y el odio, decía Freud, es una forma de amor. Todos somos bisexuales, todos somos de River y de Boca, hay que entenderlo. Pero nos definimos por una identidad y por la distancia con esa identidad en conflicto. "No ser como Boca" dice la gente, y claro que no lo somos. Pero ser como Boca va más allá de un resultado de un partido. Eso sí nunca cantaría "esta tarde cueste lo que cueste esta tarde tenemos que perder". No, simplemente es una mirada pasiva. Es como un partido de verano, probaría jugadores, etc., no pido que vayan para atrás, simplemente deseo que pierda. Y que ganen los pobres es un sentimiento digno. Ser solidarios con el Lobo también nos hace ser el más grande, lejos.