lunes, enero 23, 2012

REAL MADRID // Está solo



Después de un año y medio al frente del equipo, José Mourinho atraviesa el peor momento desde su arribo a Real Madrid: entidad prestigiosa, exigente y respetada aunque sumida hoy en un desconcierto de singulares proporciones. Las causas de los cuestionamientos que recaen sobre el portugués remiten a las nuevas derrotas con el Barcelona (por la Liga Española y la Copa del Rey, ambas en condición de local), agravados por dos cuestiones concomitantes: el nivel de juego exhibido por el Madrid en esos partidos y no haber podido sopesar desde su carismática conducción la marcada hegemonía del Barcelona, al dirigir a un equipo con las condiciones suficientes para interrumpir la racha del cuadro culé, señalado por especialistas como el "mejor de la historia".

Dificil lograrlo cuando no median tiempos ni se evalúan procesos que importan, y mucho. Con Mou, los merengues consiguieron la Copa del Rey, tras derrotar al mismísimo Barcelona, perdieron por muy poco la semifinales de la Champions League en 2011 ante los blaugranas y en la actual temporada de la Liga Real Madrid superó su mejor registro de puntos obtenidos en 19 fechas (49), acumula un récord de goles en la misma cantidad de jornadas (50) y le lleva 5 unidades al conjunto de Pep Guardiola. Su porcentaje de eficacia ronda el 87 %, en el marco de un torneo brutalmente desparejo habida cuenta del poderío económico de los dos clubes más emblemáticos de una España, paradójicamente, cercada por una profunda crisis política y social . Los números y el juego, como se advierte, eximen de mayores reparos o pedidos de renuncia al entrenador, nuevamente en el centro de la escena a partir de una construcción mediática conocida en los días de la derrota, centrada en sus modos presuntamente autoritarios, su falta de autocrítica, el pragmatismo derivado de las tácticas y estrategias empleadas.




Pero existe un motivo que explica situaciones pasadas y presentes, siempre con implicancias negativas para el cuadro merengue. La prensa deportiva de Madrid no es cualquier prensa: interviene en la vida política e institucional sobre la base de un aceitado dispositivo de persuasión, dado el poder y los alcances de los diarios Marca y As, capaces de urdir campañas contra técnicos, dirigentes y jugadores amén de vender noticias provenientes de dudosas fuentes, afirmados en su rol de jueces legitimados, visualizados por muchos como "la voz del Madrid", infranqueables y hábiles para defender sus intereses. Este actor influyente, da la sensación, genera ruidos en el interior del club difíciles de atenuar, cuyas resonancias repercuten en una dirigencia que viene errando seguido en materia de reposicionar a la entidad y, asociado con esto, obstaculiza la idea de definir y consolidar un proyecto que no se desplome ante la primera turbulencia.

Ejemplos, sobran. Decía Alfredo Relaño, director del diario As, tras la contratación de Mourinho. "Ahora llega a España por la puerta más difícil: el Real Madrid. La más difícil porque el Madrid lo tiene que ganar todo, porque en todo lo que juegue tiene enfrente al tremendo Barcelona de estos días y, también, porque el Madrid nunca ha sido un equipo de entrenador. Por alguna ley no escrita, que son las que valen, a este equipo nunca se le ha recordado por su entrenador (...) Pues ahora estamos ante el Madrid de Mourinho. La llegada de este entrenador de tantos éxitos es tanto o más significativa por cuanto que Florentino Pérez (presidente) se había ganado en los últimos años una fama, no del todo injusta, de decidir al ciento por ciento sobre los fichajes e influir al noventa sobre las alineaciones. Para todos los que estamos cerca del Madrid, la decisión de Florentino de fichar a Mourinho fue un gesto casi heroico, una renuncia a manosear el juguete, una decisión drástica y difícil como la de dejar el tabaco de un día para el otro. Con Mou el Madrid abre otro tiempo. El mejor club del siglo XX se pone en manos del mejor entrenador de lo que va del siglo XXI. El experimento es interesante". El visible optimismo de Relaño mutó en escepticismo y enojos luego del traspié del Real Madrid ante el Levante, en esta temporada donde brilla y ofrece una contundencia admirable. "Fue la peor impresión del Madrid de Mourinho desde aquel 5-0 de Barcelona. Y ojo, que ya está en su segunda temporada", sostuvo. Lo último escrito por Relaño suma otro enfoque a las palabras de bienvenida y a la implacable sentencia cuando los resultados no acompañan. "La obsesión del Barça ofusca a Mourinho seriamente y eso hace que arrastre al Madrid a un mundo que no es el suyo. Ante el Barça tiende a convertirse en algo muy distinto y desde luego peor. Y son estos últimos partidos los que se ven en todo el planeta, no los otros, que son más y son mejores ", señaló en su columna, con algún que otro elogio -pese a todo- hacia el equipo dirigido por el técnico portugués.






Marca, en tanto, adoptó una actitud decididamente desestabilizadora, como ya ocurrió otras veces, luego de ponderar la imagen de Mourinho en el comienzo del ciclo del ex técnico del Inter. Previo a la caída con el Barcelona por la Copa del Rey, sugirió sin disimulo, en la portada del diario, que el entrenador alemán Joachim Löw era el candidato ideal para hacerse cargo del equipo. A lo que se sumó otro hecho que revela la animosidad de este diario y la magnitud de su rol sobre el seguimiento de la actualidad del Real Madrid. Antes del reciente duelo con el Atlético Bilbao, con las heridas abiertas del público luego de otra derrota frente al cuadro culé, publicó en tapa una desavenencia entre un jugador y Mourinho en tamaño gigante, junto pequeñas notas relativas a "cómo recibirá la afición a Mou". La saga de noticias acerca del sombrío clima en torno del entrenador se completó finalizado el partido donde Real Madrid superó al equipo de Marcelo Bielsa. As levantó un segmento del programa televisivo Punto Pelota, en el cual un periodista, Sirio López, sostenía con enfasis y a modo de primicia que Mourinho se irá el 30 de junio, independientemente de los resultados. Un programa cuyos columnistas, ubicados en un panel similar al envío local El show del fútbol que conduce Alejandro Fantino, especulaban sobre la chance concreta de un Real Madrid sin Mou.

Se observa, según el presente escenario, el influjo de la prensa deportiva madridista, sus modos oscilantes, el éxito inmediato como única variable de análisis. Y ligado con esto la inestabilidad de una conducción que delega poder y capacidad de decisión en un entrenador, luego exige respetar la historia madridista y al día siguiente inicia otro proyecto, con características diametralmente opuestas al ciclo anterior. Elegido para el cargo, sabían los que avalaron la contratación de Mourinho de su alto perfil, la forma de enfrentar a fuertes actores como la UEFA y los medios de comunicación, además de una centralidad en torno de su figura y manejo de grupo que exigía, cuanto menos, paciencia. "Prostitución intelectual", de hecho, es una expresión del portugués que no la pronunció en Madrid sino mucho antes, en paisajes donde quienes confiaron en sus saberes y su conducción obtuvieron réditos. Parece difícil, frente a semejante adversidad, que el Madrid de Mourinho arribe a zonas más prósperas y revierta lo que parece sentenciado: más temprano que tarde y en la soledad conocida -rémora de la infancia- Mou será historia vieja de un club cuyos ruidos enemigos se generan en casa.

P.P.

2 comentarios:

sebastianudo dijo...

yo no creo q se le cuestione q pierda con el Barca o que lo haga jugando mal,se le cuestiona q renuncia a un estilo que definio al Real Madrid desde que tengo uso de razon.
cuando enfrenta al Barca lo hace como un equipo pequeño y encima apela a malas artes.
para mi no es un DT para el Madrid.

Madrilero dijo...

Hay un tema importante. La prensa de Madrid está alimentada desde el propio club. Son los propios miembros de la clase media dirigente los que hacen llegar a los oídos de los periodistas de estos diarios las "informaciones" que luego aparecen (matizadas o no). Un día "baja" la orden y se publica "Mou Rey del Universo" al día siguiente conviene sugerir que se va, o que Löw está al caer y entonces se publica eso. As y particularmente Marca, venden tanto si va todo fenomenal como si es un escándalo (ellos dicen que venden más cuando el Madrid gana, pero mienten, tienen un amplio mercado ANTI-madridista que compra morbo).

Si Florentino Perez (y la voz oficial institucional -Zidane, Butragueño-) aparece respaldando fuertemente todo lo que dice y hace Mourinho es una mera cuestión de negocios en común. El hombre fuerte del RM (y diría del fútbol europeo) es Jorge Mendes, Mourinho, además de un magnífico entrenador, es el vendedor nº 1 de los productos Mendes, revaloriza a los jugadores que Mendes representa y no precisamente a cambio de chirolas.

Aún si Mou se va en junio, Mendes se quedará en el Madrid y atrás de Mou vendrá otro entrenador que acepte convivir con los Coentrao, Pepes y demás representados que Jorgito quiera colocarle a Floren a precio de oro.

El problema de Mou, que es muy suyo, es su ego. Lo está traicionando y lo vuelve cada día más paranoico, especialmente en todo lo que hacen y dicen los futbolistas españoles del plantel. Estos no lo detestan, pero, pero(?) no gustan para nada del trato demasiado severo con ellos a la vez que poco riguroso con los mendesianos (Carvalho, Pepe, Di María, Coentrao, Cristiano). Los españoles (Ramos, Xabi, Casillas, Arbeloa, Albiol) no se pueden permitir elaborar una encamada contra Mou porque:

1)Pierden terreno en la selección (ver caso Albiol) y hoy, participar en la roja es una fuente de ingresos enorme para los jugadores españoles en publicidad - además de que es EL momento histórico en lo deportivo para estar ahí.
2)Ir contra Mou es ir contra Mendes y contra Florentino.
3)Marcelo, Benzema(protegido del presi), Kaká, Higuaín, Ozil y demases no comen vidrio y se posicionan donde no les quema el sol, por lo que es probable que en una revuelta halcones y palomas se pasen al lado portugués.

4) Casillas y particularmente Xabi Alonso, los dos pesos pesados del grupo español, son unos SEÑORES. Tienen una cultura de fair play REAL y una profesionalidad que sorprendería a más de uno. Moralidad intachable de verdad. Inimaginable que se fumen a un entrenador echando para atrás al plantel o encabezando una de esas movidas. Esos tiempos se fueron con Raúl y Salgado.

Saludos.