El día que se vaya el gordo papada

Ayer pisé mierda en la calle. Seguro que es culpa de Aguilar. Quizáshaya que reconocer que todos estamos susceptibles, pero la sensaciónde que todos los males que ocurren en River son por obra y gracia delseñor de la papada, no me la quita nadie. En esta mezcla desinsabores que ya comienza a depararnos el ´08, algunos dirán que laesquizofrenia nos lleva a concluir que todo es obra de ese payaso. Elsábado último, luego de que que las cosas volvieron a ser como eran,nos sentimos invadidos por la zozobra nuevamente, al ver una defensaindefensa (por que sigue Gerlo por Dios!!!), un arquero que se para adiez metros del arco ante un remate de Riquelme (como si no supiésemosde su comba envenenada hacia el arco), o un esquema que no se sabe sies con tres o cuatro en el fondo, pero que sigue haciendo agua. Elcolmo surge, cuando un jugador con tanta destreza como yo se de físicacuántica, nos hace un gol apoyado en el travesaño. Otra vez para lacargada. Se dirá que un partido de verano es solo eso. Lo cierto, y alo que apunto, es que ante cada nueva desgracia que acompaña al clubhace por lo menos diez años, surge un sujeto dueño por excelencia dela responsabilidad, cuyo nombre redunda mencionarEste mismo sujeto, se jacta cuando se le adjudica la desacertadadecisión de no retener al paragua Caceres. "Si, Caceres no juega enRiver por culpa nuestra, de los dirigentes" se le oyó decir sinestupor. Mantiene en el club a la sombra de lo que fue un jugadordistinto, escatima la moneda en el mercado de pases, pero terminaconcretando caprichosas operaciones que agrandan el pasivo, y la listaes tan larga que no alcanzan los mb de memoria. El mismo también,intenta hacernos creer que con Ramón no hay cosas personales queimpidieron su regreso. "Ramón conmigo es Lassie, charlando conmigo esLassie. A mi no me dio las razones de su negativa". Sabe, sin embargo,de la inexorable vuelta futura del riojano, e intenta vendernos sutraje de caperucita. "Por supuesto que lo iría a buscar de nuevo, silo fui a buscar hace un mes. Claro que Ramón volverá a River". Estehampón de guante blanco que representa lo peor de una clase políticadirigencial, que se dice opuesta a la derecha macrista, nos quierehacer tragar la píldora, de las supuestas buenas intenciones, esa queno se vende por estos días.Descarto de movida, el pentagonal pedorro obtenido, que pudiera serpaliativo, o lo que suceda el sábado venidero en Mendoza, porque novan a alterar la historiaTodo es culpa de ese ave rapaz, me dije el sábado último, luego delpitazo de Baldassi. Razonamiento que parece descabellado, cuando vemosque juegan once jugadores, elegidos por un técnico (cuyo ayudante esun despreciable jugador que supo hablar pestes de River en el ocaso desu "brillante" carrera), que es el que da la órdenes. Pero que setorna acaso más lógico, si nos quitamos de una buena vez la venda delos ojos, y vemos que sucede cuando el poder se deposita en manos deun mercenario, déspota, que decide quienes se quedan y quienes se vandel club.

Posteó: Pichu