Copa América - Resumen 4

MEJOR EQUIPO: MEXICO

PEOR EQUIPO: CHILE

MEJOR JUGADOR: JUAN ROMÁN RIQUELME-NERI CASTILLO

PEOR JUGADOR: DELEGACIÓN CHILENA (menos uno)

MEJOR GOL: HUMBERTO SUAZO A BRASIL

MEJOR ARBITRO: CHANDÍA (CHILE)

PEOR ARBITRO: PESSOTTA (ARGENTINA)

MEJOR PARTIDO: URUGUAY 4 VENEZUELA 1

BOCHORNO: DELEGACIÓN CHILENA. LA COSA FUE MÁS GRAVE DE LO QUE SE DIJO PÚBLICAMENTE, CON MUCHO ALCOHOL Y DESMEDIDA VIOLENCIA.

LA NOTA DESTACADA: A LA ORGANIZACIÓN DE LA COPA, SERIA Y DE PRIMER MUNDO COMO SE APUNTÓ EN OTRO INFORME, SE AGREGA LA CALIDAD DE LOS PARTIDOS. NO ES FRECUENTE OBSERVAR TANTOS Y TAN BUENOS ENTRE SELECCIONES JUGANDO EN EL MAS ALTO NIVELEL. INDUDABLEMENTE, SERÁ UNA COPA DE COLECCIÓN.

EL COMENTARIO

Se trata de dos estilos. Uno, el de la paciencia y la escesiva circulación del toque, el otro del vértigo y el apuro desmedido. En el primero podemos alistar al Basile actual y al Maturana de otras épocas mientras que los segundos llevan el sello de Marcelo Bielsa o uno de sus herederos, todavía a prueba, Ricardo La Volpe. Lo cierto es que ninguno garantiza el éxito anticipado, entre otras cosas, porque mucho depende de la calidad de los intérpretes y del ojo clínico del seleccionador. En Argentina-Perú, por caso, se vio un solo equipo pese a la teoría del "ablandamiento" erguida por un sector del periodismo. De haber convertido algunas de las 3 situaciones favorables en el PT con Tévez en cancha, estos comentarios de ocasión sirven para complementar la teoría, no como fórmula preconcebida. Suena más convicente hacer hincapié en el estilo de un equipo que hace culto del buen juego, con un estratega genial como JR Riquelme, una joya todavía en deuda con el juego colectivo -Lionel Messi- y el gran abanderado para dotar de mística la idea pergeñada por Basile: Javier Mascherano.
Pero atención porque el otro modelo, aquél de Bielsa que logró la medalla faltante en las vitrinas de la selección, también era una delicia a los ojos por el ritmo frenético que le imprimía al juego cimentado, especialmente, por la voracidad ofensiva de la propuesta y la adrenalina de los ínterpretes. Sin las anteojeras resultadistas, ese equipo también supo dejar su marca en el corazón de los aficionados.
En suma, se trata de dos estilos que reavivan el viejo debate. La pausa y el vértigo. Se podrá estar de acuerdo con una u otra propuesta, pero en ambas se reconoce la nobleza para ganar con buenas armas y en buena ley. Con un elemento a favor de la selección de Basile, este equipo prescinde de los tacticismos y los rebusques idiomáticos del cientificismo futbolero. Gana con la receta más degrada en los últimos años, la que conecta con la "nuestra", una definición cargada de gambetas, pausa, pared y cortada a lo largo de cien años de historia.
El revés de la trama, entonces: pase lo que pase, las gradas seguirán llenas.

Posteó: Pablo